domingo, 7 de junio de 2009

Villanovense 1 San Roque 3

Incidencias: tarde fría, con viento sol y nubes en el estadio Romero Cuerda de Villanueva de la Serena, con un césped algo pesado y rápido por las fuertes lluvias caídas antes del encuentro, donde se dieron cita 1.500 personas, 300 de ellas aficionados leperos.
Árbitro: Sevilla Lérida, regular, aunque terriblemente casero. Amonestó a los locales David Carmona y Moraga; y a los visitantes Juanlu, Alfonso y Capi.
Goles: 1-0 Edu Jurado, min. 8.
1-1 Carlos, min. 78.
1-2 Joaquín, min. 83
1-3 Joaquín, min. 87.

El San Roque volvió a la senda de la victoria en Villanueva de la Serena y por fin pudo perforar la portería contraria en estas eliminatorias por el ascenso a 2ª B, tras un partido en el que fue de menos a más y durante el que hizo valer sus mejores armas el orden, la precisión y la pegada, ante un Villanovense de que fue desinflando con el paso de los minutos y que tendrá que apelar a la heroica si quiere seguir vivo en la lucha por la promoción de categoría.

Este equipo se merece un aplauso.

De inicio, Alejandro Ceballos volvía al dibujo táctico que tantos buenos réditos le ha dado durante el año, con un extremo en cada banda y Vidal en la media punta, con Casiano de ariete, quien gozó de algunas buenas posibilidades y que probablemente el mejor del San Roque junto a Otón, si no contamos los goles de Joaquín. A pesar de ello, el cuadro aurinegro sufrió muchísimo durante el comienzo del choque por la presión de los jugadores del Villanovense, que se juntaban de cuatro en cuatro tanto para defender como para atacar la zona del balón. Cuando los leperos lograban zafarse de estas marcas, los extremeños no dudaban en cometer alguna falta rápida para detener su avance y así fueron los aurinegros desconectándose del balón durante la primera media hora, que fue de total dominio local.

Un dominio que se tradujo en el 1-0, obra de Edu Jurado, una increíble vaselina desde lejos que sorprendió adelantado a Isaac y que se coló en la portería lepera ayudado por el viento. Tras el tanto, el cuadro serón no varió un ápice sus argumentos y continuó asfixiando la salida de balón de los visitantes, que sólo veían por la banda izquierda su vía de escape con Raúl Domínguez o las incorporaciones siempre peligrosas de un Ótón muy entonado, tanto en defensa como en ataque. En el otro lado, Capi y Juanlu tuvieron que sufrir la pesadilla del rapidísimo Moraga, por lo que tenían que estar más pendientes de no dejar huecos a sus espaldas que de otra cosa; y por el centro, Nando y Vicente estaban más por la labor de destruir que de construir.

Debió empatar el San Roque antes del descanso.

Así las cosas, el San Roque disparó por primera vez a portería al cuarto de hora, tras un centro de Otón que tocó Vidal y que salió fuera por poco; acción a la que respondió Pablo Valencia con un tiro muy peligroso desde la frontal que obligó a Isaac a emplearse a fondo para enviar la pelota a córner. Hasta más o menos la media hora de partido, el choque se movió por las peligrosas aguas del dominio local, hasta que los leperos consiguieron zafarse de sus respectivas marcas y lograron empezar a desplegarse en ataque con más comodidad. Así, el equipo aurinegro acumuló las suficientes ocasiones como para marcharse al vestuario con al menos el empate en el bolsillo, sobre todo tras un mano a mano de Casiano ante José Fuentes que sacó la defensa sobre la mismísima línea de gol; y un saque de falta de Vidal buscando la escuadra que evitó el meta extremeño.

A la vuelta de vestuarios, el cuadro de Domingo Suero tuvo claras sus intenciones: replegarse y juntarse atrás para aprovechar la velocidad de Moraga y Valencia a la contra, algo que estuvo a punto de aprovechar a los 4 minutos de la reanudación tras un contraataque fulgurante que se quedó, afortunadamente para el San Roque, sin rematador. Con los leperos buscando constantemente a Casiano, que caía a las bandas para encontrar la bola, el juego se convirtió en la laboriosa tarea de ir buscando un agujerito en la tela para tirar de él y romperla, como le ocurrió al propio brasileño en el minuto 56, tras una extraordinaria jugada de gambeteo dentro del área que culminó con un tiro alto cuando los aficionados leperos ya casi cantaban el empate.

Carlos se estrenó como goleador con la aurinegra.

Así que Ceballos no tuvo más remedio que mover el banquillo para darle al encuentro el punto exacto que necesitaba y ganarlo. Una vez más, el míster lepero acertó de pleno con los mismos, que supuso también el movimiento de alguna ficha: Joaquín entraba a la cancha por Raúl Domínguez, lo que obligó a Casiano a ocupar la banda izquierda, desde donde creó muchísimo peligro; y Jonathan, también revulsivo, ingresó en el campo por un exhausto Capi. Así que durante el último cuarto de hora, con el San Roque en superioridad física y anímica, destrozó las ilusiones locales con 3 zarpazos de oro para el sanrroquismo.

El primero de ellos en el minuto 78: Otón gana un balón por alto en el centro del campo, el banquillo local reclamó falta, probablemente con razón, que le cayó a Casiano, quien tras un gran movimiento de samba se marchó de su marcador, encaró al meta para regatearlo pero quedándose sin ángulo, por lo que retrasó la pelota para Joaquín, que remató a bocajarro, un disparo que sólo pudo enviar la defensa a córner para evitar el 1-1. El tanto llegaría a la salida de saque de esquina, que botó Vidal para la cabeza de Carlos, quien llegando desde atrás remachó a la red y consiguió, además de su primer gol con la camiseta del San Roque, el empate y enderezar la eliminatoria.

La afición lepera celebra la remontada, ante la decepción local.

El Villanovense quedó finalmente tocado, se desfondó y pagó muy cara esta circunstancia, porque el San Roque se embaló buscando la victoria y fue un martillo pilón, recordando por momentos a aquel equipo que se marcó varias goleadas consecutivas ante los gallitos del Grupo X. Y así fue cuando en el minuto 83 Vidal se encontró la pelota en la zona de tres cuartos, se giró hacia la portería, vio los espacios abiertos de la defensa local y por ahí envió un pase perfecto para el pichichi Joaquín, quien encaró al meta local y lo batió de tiro cruzado. El gol de la remontada llevó la locura a la zona del estadio donde estaban los aficionados leperos, que terminaron su fiesta celebrando el tercer gol, el mejor de la tarde, en el minuto 87: Casiano recibe un pase desde atrás, encara a los defensas en la línea del centro del campo, regatea para adentro y levanta la cabeza; ve a Joanthan libre de marca en el otro lado de la cancha, cambia la orientación del juego y le hace llegar la pelota, que el lepero baja con clase; ve el desmarque de Joaquín dentro del área y le envía un centro perfecto que el ariete paradeño empalma sin dejar caer a las redes del Villanovense.

También es cierto, que el cuadro serón tuvo aún sus opciones a la desesperada, tanto es así que Isaac evitó que los extremeños acortaran distancias en un par de ocasiones. Pero el marcador ya no se movería. Con el pitido final del colegiado, los jugadores del San Roque se acercaron hasta la grada donde estaban los aficionados leperos, para agradecerles de nuevo su apoyo.

Gracias, sanrroquistas...

De esta forma, el San Roque deja prácticamente sentenciada la eliminatoria, si bien no debe descuidarse para el choque del próximo sábado a las 20:00 horas en el Municipal. Ciertamente, hubo momentos en que el cuadro lepero lo pasó mal, pero todo eso se compensa con una victoria que debe servir para animar a la plantilla para seguir luchando por el último sueño de la temporada.

El San Roque formó con Isaac, Juanlu, Otón, Alfonso, Carlos, Capi (Jonathan 74’), Nando, Vicente, Casiano, Vidal (Avilés 84’), Raúl Domínguez (Joaquín 64’).

Postdata: esta vez sí hubo comida de hermandad entre las aficiones de Villanovense y San Roque. Los aficionados leperos que acudieron a ella no dudaron en alabar la hospitalidad de los hinchas serones y nos pidieron que diéramos las gracias públicamente por ello. Pues eso, muchísimas gracias por el gran trato que hemos recibido, por la amabilidad, por la deportividad… por todo.
Postdata 2: ¿Estuvo finalmente Calderón en el partido?
Postdata 3:Algunos "aficionados" que se desplazaron hasta Villanueva de la Serena deberon haberse quedado en Lepe, porque no suman: restan. Y no hablo de ningún incidente.
Postdata 4: aquí van las fotos de Alberto, con la comida con los aficionados serones, el carnet de la peña de Calderón y la foto firmada de Mister Catering...