domingo, 2 de noviembre de 2008

Puerto Real 1 San Roque 1

Incidencias: Tarde muy lluviosa en el Sancho Dávila de Puerto Real, que a pesar de todo registró una buena entrada, con unos 800 espectadores en la única grada cubierta. El césped aguantó el chaparrón durante una hora. A partir de ahí, impidió un mejor partido.
Árbitro: García Gutiérrez, bien, aunque algo casero. Amonestó a los locales Víctor Vía y Pedro Curtido; y a los aurinegros Cisco, Capi, Vidal y Raúl Domínguez.
Goles: 0-1 Raúl Domínguez, min. 25
1-1 Sergio Beato, min. 61.

El San Roque se trajo un valioso punto del Sancho Dávila tras adelantarse en el marcador, ante un Puerto Real en el que debutaba Sergio Beato, que se ha incorporado a la entidad portorrealeña esta misma semana. Y es que los debutantes rivales suelen dárseles mal a los leperos: si hace un par de semanas era Gambeta el autor del primer gol del Pozoblanco, esta vez le ha tocado el turno a Beato para empatar el choque.

No obstante, fue el San Roque el claro dominador de la primera parte, en la que controló el ritmo del encuentro al compás que marcaba Nando, que crece por partidos. Mientras el mediocentro aurinegro estuvo en el campo, los leperos apenas pasaron apuros; Nando estuvo bien secundado durante todo el partido por un Otón también inmenso, que maniató a Winde desde su lateral izquierdo. Eso sí, el interior derecho verdiblanco fue el primer jugador en disfrutar de una ocasión, tras un centro al segundo palo de Sergio Beato que el senegalés remató con la cabeza fuera, ante la pasividad de la defensa.

Nando y Vicente dominaron.

A partir de ahí, el San Roque tomó definitivamente el mando. De hecho, antes del gol, disfrutó de varias ocasiones, especialmente tras una gran jugada colectiva en la que Casiano, titular hoy, jugó muy bien de espaldas a la portería, pasó a Vidal, quien a su vez abrió la pelota al costado derecho del área, donde Capi centró de forma precisa, obligando al meta visitante a emplearse a fondo y a jugarse el tipo, cuando Casiano casi cantaba el 0-1. Poco más tarde, sí que llegó esa oportunidad, tras un penalti clarísimo cometido por Víctor Vía, que detuvo con la mano dentro del área un disparo lepero y cuya acción cazó García Gutiérrez. La pena máxima fue transformada por Raúl Domínguez, que engañó completamente a su tocayo Raúl, ajustando la pelota a la derecha. Minuto 25 de partido.

El Puerto Real no encontraba ninguna puerta abierta, a pesar de los esfuerzos de Sergio Beato desde la izquierda, a quien entre, sobre todo, Juanlu y Capi sujetaban como podía. En esos compases, el San Roque dominaba gracias al trabajo de Nando y Vicente en la zona ancha. Incluso pudo llevarse un gol más de renta al descanso, tras un remate de Vicente a la salida de un córner que desvió el mismo Casiano, cuando la pelota se colaba sin más remedio en la portería rival. Mala suerte del delantero que andaba por allí, aunque, lógicamente, no puede desaparecer por arte de magia. Tampoco estuvo acertado el Puerto Real en la única ocasión, pero qué ocasión, que gozó en la primera parte, en el alargue: pifia en el despeje de la zaga, la pelota que queda suelta paseándose por la frontal del área pequeña y Víctor Vía, con todo a favor y a bocajarro, disparó y allí apareció milagrosamente la pierna de Isaac, que acertó a despejar el cuero.

A la vuelta de los vestuarios, Jonathan entró en el terreno de juego sustituyendo a Capi, que se quedó lesionado en la caseta. El Puerto Real, obligado por el marcador, salió con otra cara, aunque el San Roque no se desdibujó, e incluso dio un paso adelante. De esta forma, estuvo a punto de poner el 0-2 tras un remate hacia su propia portería de Víctor Vía, que salió por lamiendo el poste derecho. Poco después, Cisco haría lo propio en la meta lepera, y las cosas quedarían igualadas por ahí.


El partido se puso épico por la lluvia.

A la hora de partido cambiaría el signo del encuentro: Nando tenía que abandonar el terreno de juego lesionado, el césped dejó de drenar el agua, convirtiéndose en una lotería y Sergio Beato empataba el choque, tras rematar con la derecha un balón suelto dentro del área, quizá precedido de una falta de Winde sobre Otón en el salto. Antes incluso de asumir la pérdida de Nando en el centro del campo, el San Roque tuvo el 1-2 en la cabeza de Álex, tras una gran falta de Vidal, pero su remate se fue alto por milímetros.

A partir de ahí el encuentro fue para el Puerto Real, por lo que Natera y Víctor Vía, aliviados sin la sombra de Nando, se encargaron de empujar a los suyos hacia el área lepera. Pero el San Roque no daba su brazo a torcer, e incluso tuvo una buena oportunidad en el minuto 73, cuando Joaquín, que había entrado por Casiano, encaraba en solitario al portero tras una pifia de los centrales, pero que el césped se encargó de arrebatarle, pues el delantero paradeño se dejó la pelota en un charco de agua.

Ahí se acabaron las opciones de ataque de los leperos, que buscaron refugio atrás ante las embestidas del rival, que, ahora sí, atacaba con furia. De hecho, el Puerto Real estrelló un balón en la madera a la salida de un córner. Pero el marcador ya no se movió y el encuentro derivó en una lucha titánica de los futbolistas contra los elementos que no llevaba a ninguna parte.

Lo importante realmente es que se ha dejado atrás uno de los campos verdaderamente difíciles, de donde se ha sacado un punto para seguir rondando los puestos altos de la tabla clasificatoria, a la espera de la visita del Sevilla C.

El San Roque formó con Isaac, Juanlu, Otón, Alfonso, Cisco, Capi (Jonathan 46’), Nando (Álex 60’), Vicente, Casiano (Joaquín 67’), Vidal y Raúl Domínguez.