Estoy con ganas de escribir últimamente, lo reconozco. Pero hay cosas que no se pueden dejar pasar, como lo de ayer con mi amigo Fermín Cabanillas o lo de hoy con la publicación de las sanciones de la RFEF.
Los más entraditos en años recordaréis a Pedro Pacheco y aquella frase suya cuando dijo que "la justicia es un cachondeo". Se formó una del copón, como podréis ver en el video. Pues yo pienso algo parecido, pero relativo a la justicia deportiva de este país -de la otra también, pero vamos a ha hablar mejor de fútbol-. Perdón, la justicia dentro de la Real Federación Española de Fútbol y, por consiguiente, dentro de la UEFA y la FIFA. Por algo será que te amenazan, directamente, con largarte de todas las competiciones futbolísticas existentes si tomas la determinación de ir, contra ellos o contra un tercero, de acudir a la justicia ordinaria.
Sería muy largo de explicar cómo funciona la "justicia" dentro de la RFEF, cómo se admiten a trámite pruebas o denuncias que no tendrían ningún recorrido en un juzgado ordinario... Sé que es imposible que una competición de fútbol pueda organizarse de manera medianamente eficaz si la justicia deportiva funcionara igual que la ordinaria. Es una cuestión de tiempo, básicamente. y de otras cuestiones, como la de que algunos mantengan a toda costa su chiringuito. Y todo ello por no hablar de arbitrajes demenciales –luego iremos con ello- como los del pasado domingo.
Pero de ahí a las incoherencias de un mismo juez de competición, único para toda la Segunda B, va un trecho. Sin entrar en polémicas y sin querer perjudicar a nadie, expongo una situación perfectamente documentada.
Jornada 6 de liga. Partido Villanovense – Balona. Final del partido. Borja Gil, jugador del equipo local, le da un cabezazo a un jugador de la Balona y le abre una brecha. El árbitro lo recoge en el acta –pincha aquí- y a ese jugador le cae, únicamente, un partido –ver aquí, cuarto enlace, página-.
Jornada 7 de liga. Partido Betis B – San Roque. Arbitraje desquiciante. El árbitro nos acaba de dejar con dos menos por las expulsiones de Lobato –de coña- y de Rojas –evitable-. Moscardó se dirige al árbitro, tras un encuentro desquiciante, y le dice que “te has cargado el partido”. Así lo recoge el acta –aquí-. ¿Sanción? DOS partidos.
¿Son equiparables las dos acciones? ¿Cuál os parecería más grave?
Más tarde, Perdigones Pacheco expulsa tanto a nuestro delegado como a nuestro ayudante sanitario por –ver de nuevo el acta- protestar de forma ostensible y tal y cual. Decidimos apelar esas dos expulsiones y el Juez de Competición NOS DA LA RAZÓN, pero NO NOS LA DA… -ver la resolución, primer enlace, páginas 5 y 6- y tanto Francis como Antonio tienen DOS partidos de sanción.
Y encima el colegiado se va rositas. O no. Nunca lo sabremos porque, a día de hoy, nadie sabe cómo funciona el comité de árbitros a la hora de sancionar, amonestar o lo que sea a sus afiliados. Sólo sabemos, y porque fuimos testigos, que el informador arbitral estuvo más de media hora en el vestuario arbitral de la ciudad deportiva del Betis, algo que no es normal.
Y la pregunta es: ¿soy sólo yo o alguien más piensa que esto no tiene sentido? El tema da para una tesis -o una antítesis-, pero por algo está tan desprestigiado el Federativo en el mundo del fútbol.
Los más entraditos en años recordaréis a Pedro Pacheco y aquella frase suya cuando dijo que "la justicia es un cachondeo". Se formó una del copón, como podréis ver en el video. Pues yo pienso algo parecido, pero relativo a la justicia deportiva de este país -de la otra también, pero vamos a ha hablar mejor de fútbol-. Perdón, la justicia dentro de la Real Federación Española de Fútbol y, por consiguiente, dentro de la UEFA y la FIFA. Por algo será que te amenazan, directamente, con largarte de todas las competiciones futbolísticas existentes si tomas la determinación de ir, contra ellos o contra un tercero, de acudir a la justicia ordinaria.
Sería muy largo de explicar cómo funciona la "justicia" dentro de la RFEF, cómo se admiten a trámite pruebas o denuncias que no tendrían ningún recorrido en un juzgado ordinario... Sé que es imposible que una competición de fútbol pueda organizarse de manera medianamente eficaz si la justicia deportiva funcionara igual que la ordinaria. Es una cuestión de tiempo, básicamente. y de otras cuestiones, como la de que algunos mantengan a toda costa su chiringuito. Y todo ello por no hablar de arbitrajes demenciales –luego iremos con ello- como los del pasado domingo.
Pero de ahí a las incoherencias de un mismo juez de competición, único para toda la Segunda B, va un trecho. Sin entrar en polémicas y sin querer perjudicar a nadie, expongo una situación perfectamente documentada.
Jornada 6 de liga. Partido Villanovense – Balona. Final del partido. Borja Gil, jugador del equipo local, le da un cabezazo a un jugador de la Balona y le abre una brecha. El árbitro lo recoge en el acta –pincha aquí- y a ese jugador le cae, únicamente, un partido –ver aquí, cuarto enlace, página-.
Jornada 7 de liga. Partido Betis B – San Roque. Arbitraje desquiciante. El árbitro nos acaba de dejar con dos menos por las expulsiones de Lobato –de coña- y de Rojas –evitable-. Moscardó se dirige al árbitro, tras un encuentro desquiciante, y le dice que “te has cargado el partido”. Así lo recoge el acta –aquí-. ¿Sanción? DOS partidos.
¿Son equiparables las dos acciones? ¿Cuál os parecería más grave?
Más tarde, Perdigones Pacheco expulsa tanto a nuestro delegado como a nuestro ayudante sanitario por –ver de nuevo el acta- protestar de forma ostensible y tal y cual. Decidimos apelar esas dos expulsiones y el Juez de Competición NOS DA LA RAZÓN, pero NO NOS LA DA… -ver la resolución, primer enlace, páginas 5 y 6- y tanto Francis como Antonio tienen DOS partidos de sanción.
Y encima el colegiado se va rositas. O no. Nunca lo sabremos porque, a día de hoy, nadie sabe cómo funciona el comité de árbitros a la hora de sancionar, amonestar o lo que sea a sus afiliados. Sólo sabemos, y porque fuimos testigos, que el informador arbitral estuvo más de media hora en el vestuario arbitral de la ciudad deportiva del Betis, algo que no es normal.
Y la pregunta es: ¿soy sólo yo o alguien más piensa que esto no tiene sentido? El tema da para una tesis -o una antítesis-, pero por algo está tan desprestigiado el Federativo en el mundo del fútbol.