El colegiado se convirtió en protagonista del encuentro
Juan Bautista / Odiel Información
Juan Bautista / Odiel Información
El San Juan se impuso ayer al San Roque de Lepe B en un partido loco que tuvo en el colegiado Muñoz Ballesteros a su principal protagonista. Y es que el árbitro expulsó a cinco jugadores y sacó más de 20 tarjetas. El partido comenzó con ambos equipos tanteándose, pero con cierto dominio local. De hecho, el 1-0 llegó a los 16 minutos, gracias a un buen remate de Ángel a centro de Prudencio, que acabó en el fondo de las mallas. En la primera parte hubo poco más que destacar, pues salvo el gol, apenas hubo un par de ocasiones del San Juan. Pero en el minuto 41, el trencilla comenzó con su recital, expulsando al visitante Rubén. Los primeros cuarenta y cinco minutos acabaron con nueve tarjetas.
Ya en la segunda parte, el San Roque lo intentó hasta que consiguió, primero la igualada, por medio de Muriel, que transformó un penalti, y después la remontada, por medio de Joaquín, otra vez de penalti. Pero los leperos querían más y se fueron en busca del tercero. Sin embargo, fue el San Juan el que tomó las riendas del partido y en el minuto 89 Merino llevaba de nuevo las tablas al marcador de un partido loco. Cuando el empate parecía inevitable, ya en el descuento, los locales trenzaron una buena jugada, jugada, muy bien enlazada, que acaba con un centro al segundo palo, donde Juan Álvarez logró rematar a gol y llevar el delirio a la grada del Municipal.
Ya en la segunda parte, el San Roque lo intentó hasta que consiguió, primero la igualada, por medio de Muriel, que transformó un penalti, y después la remontada, por medio de Joaquín, otra vez de penalti. Pero los leperos querían más y se fueron en busca del tercero. Sin embargo, fue el San Juan el que tomó las riendas del partido y en el minuto 89 Merino llevaba de nuevo las tablas al marcador de un partido loco. Cuando el empate parecía inevitable, ya en el descuento, los locales trenzaron una buena jugada, jugada, muy bien enlazada, que acaba con un centro al segundo palo, donde Juan Álvarez logró rematar a gol y llevar el delirio a la grada del Municipal.
