Municipal. 800 espectadores.
Árbitro: Checa Montero. Mal. Amonestó por el San Roque a Otón, Francis, Ismael, Cantos e Iván; y en el Sevilla C amonestó a Salas, Javi González, Sachetti y Fernando, y expulsó a Silva por roja directa.
Árbitro: Checa Montero. Mal. Amonestó por el San Roque a Otón, Francis, Ismael, Cantos e Iván; y en el Sevilla C amonestó a Salas, Javi González, Sachetti y Fernando, y expulsó a Silva por roja directa.
Hay veces en las que el guión exige que te dejes en la caseta el traje y la pajarita y que te pongas el mono de trabajo si quieres sacar algo positivo; ésta, era una de esas veces. Se presentaba el Sevilla C en el Municipal con argumentos parecidos a los del San Roque, con los dos equipos igualados a puntos en la tabla y con estilos de juego semajantes, que se conocen perfectamente y así fue como se plantearon los primeros minutos del choque. Los dos conjuntos, conscientes de las armas del rival, replegaron mucho cuando atacaba el otro y se desplegaba con confianza al repliegue contrario. Un toma y daca constante que duró mucho, demasiado. Tanto es así, que el primer intento de tiro a portería del partido fue en el minuto 20, pero el disparo de los sevillistas se fue a 4 metros de la portería de Nacho, hoy titular en detrimento de Cristian. Sólo en una jugada aislada y a balón parado podía llegar el gol.
Y así fue. En el 25, un centro desde la derecha de Capi se convirtió en penalti, por unas manos inocentes de Javi González dentro del área. La pena máxima, a falta de los especialistas, fue lanzada por la otra alternativa en el juego a balón parado, Avilés, a quien no le tembló el pulso y batió a Silva por la escuadra izquierda. Tras el gol, obligado por el marcador, el conjunto de Pulido se abrió un poco en ataque, aunque sin inquietar nunca la portería de Nacho, protegido por el cuadrado Avilés-Kike-Curro-Álex, hoy impenetrable para el Sevilla. Es más, fue Álex quien en un disparo desde fuera del área estuvo a punto de ampliar la ventaja, pero la pelota se marchó fuera por poco.
Y así fue. En el 25, un centro desde la derecha de Capi se convirtió en penalti, por unas manos inocentes de Javi González dentro del área. La pena máxima, a falta de los especialistas, fue lanzada por la otra alternativa en el juego a balón parado, Avilés, a quien no le tembló el pulso y batió a Silva por la escuadra izquierda. Tras el gol, obligado por el marcador, el conjunto de Pulido se abrió un poco en ataque, aunque sin inquietar nunca la portería de Nacho, protegido por el cuadrado Avilés-Kike-Curro-Álex, hoy impenetrable para el Sevilla. Es más, fue Álex quien en un disparo desde fuera del área estuvo a punto de ampliar la ventaja, pero la pelota se marchó fuera por poco.
Avilés, por la escuadra.
La segunda mitad comenzó con el San Roque enchufadísimo, sin brillar, pero con el mono de trabajo puesto y presionando la salida del balón sevillista, que una y otra vez perdía la posesión en los tres cuartos de cancha, lo que propiciaba la salida de los de Ceballos a la contra. Como en la primera parte, sólo a balón parado podía llegar el peligro. De este modo, un córner lanzado por Barranco fue la mejor oportunidad de los sevillanos, pero la pelota se paseó por el área, sin rematador. La réplica aurinegra fue impecable: robo de balón de Juanlu en la presión, que la pone para Reyes en el carril del 7, éste pasa en profundidad para Capi que centra raso con la pierna derecha, Ismael la deja pasar y Francis, a bocajarro y con su pierna mala, la derecha, la remachó a la red en el 56 de partido.
Primera parte igualadísima.
Ahí se acabó el partido y llegó el concierto de silbato de Checa Montero, muy quisquilloso con las tarjetas y las faltas. Además, el Sevilla C se quedó sin ideas, excepto por Barranco, que se fue entre 2 defensas del San Roque y su pase de la muerte fue mal rematado por Mohamed, que paró Nacho sin problemas. Muertas las esperanzas sevillistas de sacar algo positivo en Lepe, el San Roque lo intentó a la contra, pero le faltó tranquilidad, especialmente en el último pase. Algo que sí tuvieron Iván y Raúl, que fabricaron la mejor jugada del choque, triangulando en la media punto; Raúl amaga para un lado, recorta para el otro, parte la cintura de Javi González y, solo ante Silva, lanzó fuera cuando se cantaba el 3-0 en las gradas.
Inmenso trabajo de Curro.
Los 4 minutos de descuentos sólo sirvieron para que Silva, el meta sevillista, fuera expulsado con roja directa por parar con la mano y fuera del área una pelota que se colaba en su portería, una acción que el infable Checa Montero no vio y que le señaló su asistente. Como quiera que el Sevilla ya había agotado los 3 cambios, tuvo que ponerse el capitán Lolo bajo los palos, aunque afortunadamente para los sevillanos, el choque terminó sin ningún otro lanzamiento a portería.
El San Roque formó con: Nacho, Juanlu, Kike, Avilés, Otón, Álex, Curro, Reyes (Raúl, min. 71), Capi, Francis (Iván, min. 60), e Ismael (Cantos, min. 80).
El San Roque formó con: Nacho, Juanlu, Kike, Avilés, Otón, Álex, Curro, Reyes (Raúl, min. 71), Capi, Francis (Iván, min. 60), e Ismael (Cantos, min. 80).