Incidencias: Municipal de Lepe con la presencia de unos 1.200 aficionados. Terreno de juego pesadísimo por las lluvias y tarde de aguaceros intermitentes.
Árbitro: Santos Caballero, del comité extremeño. Amonestó a los locales Álex Hornillo, De Lucas y Joaquín; y a los visitantes Manolo, Baixa, Mikel Méndez, Álvaro y Brais. Expulsó con roja directa a Vidal por el San Roque; y con doble amarilla al foráneo Vergara.
Goles: 0-1 Florián, min. 51.
0-2 Petu, min. 56.
1-2 Joaquín, min. 78.
Árbitro: Santos Caballero, del comité extremeño. Amonestó a los locales Álex Hornillo, De Lucas y Joaquín; y a los visitantes Manolo, Baixa, Mikel Méndez, Álvaro y Brais. Expulsó con roja directa a Vidal por el San Roque; y con doble amarilla al foráneo Vergara.
Goles: 0-1 Florián, min. 51.
0-2 Petu, min. 56.
1-2 Joaquín, min. 78.
Cuando los elementos se alían contra ti y, además, tienes la tarde tonta de la liga, ocurre lo que ha ocurrido esta tarde en el Municipal de Lepe. No pintaba nada bien el partido para los locales, sobre todo por el mal estado del terreno de juego, fruto de las intensas lluvias que azotan el occidente andaluz; además, a pocos días de la importante cita copera ante el Baracaldo y con la ausencia de hasta 4 jugadores potencialmente titulares y alguno físicamente tocado, todo formó un cúmulo del que sacó provecho un Moratalla que se adaptó mejor al terreno de juego y que asfixió la creación de fútbol por parte local, con orden y con la calidad de un Vergara inmenso, sin lugar a dudas el mejor de los 28 jugadores que hoy saltaron a patear un balón en la localidad lepera.
Y eso que a los pocos minutos el San Roque ya tenía el mando del partido, que se jugaba todo en la mitad que defendía el Moratalla, si bien el juego carecía de la profundidad suficiente como para llevar mayores sobresaltos a la meta de Manolo, que recibió el primer susto a balón parado y que a punto estuvo de costarle el 1-0 por culpa de un malentendido entre él y sus defensas. Al filo del minuto 25 pasaron varias cosas que pudieron inclinar la balanza del lado local antes de que empezara a caer el primer aguacero fuerte; primero una jugada personal de Juan Villar que culmina con un disparo ligeramente desviado; y posteriormente la mejor oportunidad de la primera parte con un penalti de Mikel Méndez a Vicente que Santos Caballero no dudó en pitar. La pena máxima la ejecutó Añete y la paró Manolo, cuestión que dejó tocado de la moral a los aurinegros para el resto del choque.
Porque a raíz de ahí, el San Roque perdió el mando del encuentro y cedió ante el empuje a trompicones del Moratalla, que disfrutó de 2 buenas oportunidades antes del descanso que se encargó de desbaratar Isaac. Para colmo de males locales, Oliveria se rompía en el minuto 39 y tenía que ser sustituido por Weto, que se adaptó muy bien al lateral derecho, todo hay que decirlo.
A la vuelta de vestuarios, y con el público y el San Roque más enchufado, un centro desde la izquierda de Vidal terminó con el remate de volea de Vicente que se marchó lamiendo el palo cuando casi todo el mundo celebraba el gol, un tanto que llegaría, pero en el lugar menos pensado. Corría el minuto 51 cuando Hornillo peinó mal hacia atrás una pelota que debió haber controlado; el cuero quedó botando en la frontal donde Florián enganchó una buen disparo a la media vuelta que sorprendió a Isaac. Sólo 4 minutos después, en plena pájara aurinegra, Vergara se internó en el área, encaró a Isaac y disparó, aunque fue agarrado por Vidal de forma clara: ocasión manifiesta de gol, tarjeta roja para el lateral izquierdo aurinegro, que se perderá la ida de la Copa. La pena máxima la ejecutó fuerte y al centro Petu, dejando heladas las ya de por sí frías gradas del Municipal.
Sólo un milagro podía meter de nuevo al San Roque en el partido, jugando como estaba a la heroica, con Joaquín y Raúl bajando o prolongando los envíos desde la defensa, ante la imposibilidad de llevar el balón controlado hasta el área rival. El milagro se produjo en el 78, tras un centro de Chapi al segundo palo que remachó Joaquín de un zurdazo, poniendo el 1-2 y haciendo temer a los visitantes por su renta de 2 goles, que estuvo apunto de enjugarse 2 minutos más tarde: internada de Villar desde la derecha y disparo que repele Manolo; el rechazo cae a los pies de Añete que larga un derechazo al que responde de nuevo el meta visitante sacando una mano salvadora.
El partido terminó rodeado de polémica, al anular el colegiado un gol a Joaquín, que recibió la pelota en una posición dudosa. La primera impresión que dio era que Raúl no estaba bien posicionado, pero sí el paradeño, pero el asistente levantó el banderín y la cosa acabó en nada.
De esta forma, el San Roque vuelve a caer en liga tras una serie de buenos resultados, con la duda de saber si va a poder disputarse la ida de la Copa RFEF en un terreno de juego más o menos en buen estado. La derrota supone un pequeño traspiés en las aspiraciones de los aurinegros, si bien continúa en posiciones de privilegio.
El San Roque formó con Isaac, Álex Hornillo (Raúl 67’), Nando (Joaquín 53’), Vicente, De Lucas, Vidal, Juan Villar, Chapi, Oliveira (Weto 39’), Añete y Alfonso.
